Tres años después de su meteórico ascenso con su álbum debut, el cuarteto neoyorkino más tropical del indie pop rock contemporáneo lanza este año su segundo trabajo, con el que confirman su sonido y demuestran una evolución modesta pero interesante.
Continúan con su inigualable propuesta de ritmos exóticos y suaves melodías. Sus letras tienen esa espontánea y contradictoria actitud adolescente que va de lo melancólico a lo delirante. No ocultan sus influencias, que van desde Talking Heads hasta Paul Simon o Harry Belafonte, siempre contando con la inconfundible voz de su vocalista.
Una vez más juegan en sus canciones con suaves paisajes que recuerdan a esos días tranquilos en soleadas playas tropicales, pero lo mejor llega cuando se atreven a subir el volumen e intentan con ritmos más cercanos al punk, el ska o el surf que completan y redondean este sonido por demás original y divertido.
La mejor prueba de esto es Cousins, el segundo sencilo del disco, que sería el equivalente al A-Punk del primero. Una canción tan divertida como el video.
Después de dejar el sello con el que lanzaron sus dos primeros discos, este dúo de Seattle se reúne con algunos amigos instrumentistas, cantantes y raperos y lanza un sorprendente tercer trabajo.
Dave Einmo en la guitarra y la voz principal y Trent Moorman en la batería acompañados de teclados, sintetizadores y samplers, rompen con los géneros y etiquetas musicales y logran una fórmula que suena diferente, sofisticada, irreverente y muy bailable.
Composiciones que primero se escriben y se tocan con instrumentos elécticos para despues ser sampleadas y vueltas a tocar con músicos invitados y para finalmente mezclarse con elementos electrónicos, en un ejercicio de astucia e ingenio en la producción. Sus canciones son un variado muestrario de influencias reunidas con sencillez y elegancia al estilo de Beck o Gorilla
Pop rock indie, electro funk, hip hop, guitarras y breakbeats, Eclecticismo, actitud y buena vibra que se conjuntan en una muy disfrutable propuesta que te pone a mover los pies. Y en el video de We're Always On The Wrong Side Of Sunrise se nota que se la pasan muy, muy bien.
Pop rock indie, electro funk, hip hop, guitarras y breakbeats, Eclecticismo, actitud y buena vibra que se conjuntan en una muy disfrutable propuesta que te pone a mover los pies. Y en el video de We're Always On The Wrong Side Of Sunrise se nota que se la pasan muy, muy bien.
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