Debe ser una cuestión generacional, pero son ya muchos los artistas que tuvieron su fama en la década de los 80 que están regresando al estudio para dejar claro que, lejos ya de la atención del gran público y las estaciones de radio, siguen haciendo música con toda la actitud de las grandes estrellas de rock.
Así que no se asusten, estamos en el año 2011, pero como si fuera una máquina del tiempo, tenemos cuatro discos que marcan el regreso de estos veterano.
THE CARS, MOVE LIKE THIS
El primer disco de esta banda desde su desintegración en 1988, es decir, 24 años después de su último trabajo y parece que el tiempo no pasa. Casi sin esfuerzo, recuperan su mística, su fuerza y su estilo original, ese pop rock directo e inteligente con una mezcla de elegancia, humor y desenfado que siempre les caracterizó.
Todas las canciones fueron escritas por Rick Ocasek y producidas por Jacknife Lee y la propia banda, haciéndole un tributo muy especial a Benjamin Orr, quien falleció en el año 2000 víctima del cáncer, ya que no buscaron a otro bajista, sino que tocaron ellos mismos las partes con un instrumento que perteneció al músico fundador de esta banda.
Tienen temas bien rockeros como Keep On Knocking o Drag On Forever o sentimentales como Soon o Take Another Look, con las guitarras y los sintetizadores bien aceitados y funcionando a la perfección.
Una gran vuelta a las pistas de estos automóviles que, aunque no sean el último modelo, están listos para dar muchos kilómetros más.
KATE BUSH, DIRECTOR’S CUT
La que fuera una de las niñas prodigio del rock, apadrinada en sus inicios por David Gilmour y pareja sentimental de Peter Gabriel, regresa con su particular estilo en el que mezcla rock, pop, música clásica, étnica y folk, siempre con una intención artística y conceptual.
Llevaba desde 2005 sin lanzar nuevo material y técnicamente no es un álbum nuevo, ya que se trata de cuatro canciones de The Sensual World (1989) y siete de The Red Shoes (1993), que han sido regrabadas por partes y mezcladas con el material original o reiterpretadas por completo.
Temas como Lily, The Red Shoes, Top Of The City y Rubberband Girl tienen una fuerza extraordinaria, mientras que en otros como Song Of Solomon, Never Be Mine o And So Is Love desbordan sensibilidad. Flower Of The Mountain es en realidad una reversión de The Sensual World y en Deeper Understanding, el sencillo del disco, colabora su hijo Albert y el video es protagonizado por Robbie Coltrane.
Una interesante reinvención de una de las más importantes damas del rock que no deja de producir álbumes interesantes.
BLONDIE, PANIC OF GIRLS
Una de las verdaderas bandas iniciadoras del post punk y el new wave está de vuelta con su noveno disco de estudio, el primero desde 2003 y apenas el segundo de su carrera que fue grabado fuera de la isla de Manhattan.
Con su habitual dosis de rebeldía punk, new wave y power pop, las guitarras afiladas y un sonido que suena muy actual, Debbie Harry escribe todas las letras y su voz se mantiene intacta, al igual que su belleza, que aunque los años no perdonan, aún tiene esa sensualidad y actitud de siempre.
El álbum tiene una buena muestra de una variedad de estilos. En la primera mitad del disco, D-Day, What I’ve Heard, Mother y Love Doesn’t Frighten Me tienen un ritmo acelerado y eléctrizante, mientras que en la segunda parte The End, The End, Girlie Girlie y Sunday Smile tienen ese toque reggae y ska que tan bien se les da, Le Bleu es una balada afrancesada, Wipe Off My Sweat tiene un sonido más discotequero y Words In My Mouth y China Shoes tienen un beat más lento pero más duro.
Un grupo que no deja de lado su glamour, renueva la leyenda y convencen con buena música.
PETER MURPHY, NINTH
El llamado “Padrino del Gótico” es inglés, vegano, musulman, vive en Turquía desde 1990 y llevaba desde 2004 sin grabar nuevo material. Como su nombre lo indica, es su noveno disco como solista, aunque en realidad es su octavo disco de estudio.
Con su característica voz profunda de barítono, no necesita inventar el hilo negro para elaborar un álbum lleno de fuerza y misticismo en el que las guitarras son protagonistas. Con ideas más inmediatas y una producción sofisticada, es un trabajo que él mismo describe como que “destila testosterona y al mismo tiempo es tan bello como cualquier sirena”.
Seesaw Sway, I Spit Roses o Memory Go tienen ese particular estilo directo e intenso, Peace To Each o Uneven Brittle figuran poderosos riff de guitarra y Never Fall Out o Crème De La Crème tienen obvias influencias de David Bowie. Destacan The Prince & Old Lady Shade o Slowdown con esos aullidos tan suyos y la perturbadora y oscura Secret Silk Society.
Un viejo rockero que demuestra que no hay noveno malo y que aún se mantiene vigente.